O si los dividendos son por haber desempeñado una profesión, esos días computarán a 0. Durante el juicio los abogados de ambas partes presentarán sus alegaciones y expondrán sus pruebas y argumentos. Una vez hemos tomado la resolución de proseguir luchando, podemos demandar al INSS ante los Juzgados de lo Popular.
Todos nos encontramos familiarizados a escuchar charlar de \’sentencia firme\’ en relación a cualquier proceso. Indudablemente, cuestiones muy importantes que aquí, junto a muchas otras, deseamos solucionar. En tanto que los procedimientos judiciales se dilatan en el tiempo, nos encontramos con frecuencia con abonos adicionales que suman 24 mensualidades o mucho más.
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O sea lo que se conoce como los atrasos, para lo que se establece una fecha de efectos económicos pasada. Cuando se establece una “condena en costas”, la parte que ha perdido debe pagar a la parte vencedora los importes que esta última ha invertido en abogados, procurador, peritos y emisión de ciertos documentos. Pues en un proceso de incapacidad persistente normalmente no hay condena en costas a los trabajadores.
El tiempo cuánto tarda en salir un juicio por incapacidad puede ser a un año vista o hasta un par de años. Por supuesto que es posible, y en Fidelitis lo entendemos bien pues nos encontramos especializados en ello y tenemos un prominente índice de éxito. La pensión incapacidad total resguarda económicamente por no poder ejercer la profesión recurrente, pero sí otras de distinta índole. Una vez el juicio ha tenido rincón, lo normal es que la sentencia tarde en llegar entre un par de semanas y un mes aproximadamente, si bien depende de cada Juzgado.
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Puede demorar de 2 a tres semanas, o incluso un mes, en llegar al despacho desde el instante en que el magistrado estampa su firma. Y en los casos mucho más flagrantes, cuando las limitaciones orgánicas y funcionales son muy evidentes, lo que hará será otorgar un grado de incapacidad inferior al que te correspondería. Por todo ello, en la mayoría de las ocasiones va a ser preciso recurrir a los tribunales y también interponer una demanda a la Seguridad Popular con objeto de que se celebre un juicio por incapacidad persistente y el juez ordene su reconocimiento. Tanto el INSS como el trabajador tienen cinco días hábiles para comunicar el recurso, que básicamente piensa informar de que queremos recurrir. Y después, una vez el juzgado tiene listo el expediente para que se pueda consultar, se disponen de 10 días hábiles más para lograr formalizar el recurso.
Incluso en esos casos en los que el demandante tiene una enfermedad o lesión grave e incapacitante, merecedora de una pensión, la Seguridad Social suele ser reacia a concederla, no tras elaborar una reclamación previa. Si a lo largo de todo el intérvalo de tiempo de tiempo que cubren los atrasos se ha estado percibiendo un subvención , se ha estado trabajando o con una prestación por baja médica, los atrasos no se van a cobrar. Salvo que la incapacidad temporal o el paro hayan sido de menor importe, en tal caso se abonará la diferencia -cosa que no ocurre si se ha creado una actividad laboral, sea como sea el sueldo-.
Según Galán “la Administración debería aprovechar el trámite de la reclamación administrativa anterior para no colapsar los juzgados. Se desestiman la mayor parte de ellas automáticamente, e incluso pasa el plazo legal y no hay contestación de la Seguridad Social. Muchos de estos temas podrían tener una solución rápida y no judicializarse en el momento en el que se aportan pruebas en el juzgado de lo popular en esa vía administrativa”. Ahora sabe cuándo es firme una sentencia, con lo que puede confrontar a cualquier proceso judicial con esa información.
Por eso, es fundamental que confíes en tu letrado, quien además te irá comunicando de qué plazos debes tener en cuenta en el transcurso de tu procedimiento y de todos los pasos que se han de ofrecer para lograr conseguir tu objetivo. No obstante, si la sentencia desestima el recurso, existe la posibilidad de enseñar un Recurso de Casación frente al Tribunal Supremo, pero verdaderamente en los métodos de incapacidad permanente ni siquiera se acostumbran a admitir a trámite. En la sentencia de juicio contra INSS por incapacidad se establece una fecha de efectos y la prestación hay que abonar desde dicha fecha. Sin embargo, no todas las sentencias son firmes desde el primer momento, sino que consiguen esa condición por el hecho de que los litigantes no presentan un recurso de apelación en tiempo y forma.
En el momento en que se agotan ámbas fases de la vía administrativa en la petición de incapacidad permanente y se desea continuar con la reclamación, se puede interponer una demanda frente a los Juzgados de lo Social en contra del INSS. A falta de estadísticas oficiales, Gallardo declara que “la incapacidad permanente absoluta ha desaparecido y se da con cuentagotas en casos muy tasados y que la permanente total se da también con bastantes restricciones. La vía que queda es ir a los juzgados de lo social si el caso está adecuadamente planteado, esto es, realmente bien documentado y con periciales que argumenten el nivel de afectación de esa persona”. Y la prestación de incapacidad absoluta se entrega en el instante en que ahora no se puede realizar ningún género de trabajo con un mínimo de desempeño, eficiencia y experiencia. En mucha menor medida, frente a los tribunales se puede obtener una incapacidad parcial o una Gran Invalidez -el grado mucho más bajo y más prominente de incapacidad, respectivamente-.
Diferencia Entre Grados
Pero si la contingencia de la incapacidad es un accidente de trabajo o una patología profesional, internamente la Seguridad Social reclamará el dinero a la mutua. Este certificado debe ser solicitado por el demandante en la empresa donde presta servicios. Este archivo es muy importante en el momento en que se va a pedir invalidez total o parcial.
Sin embargo, si el magistrado te plantea alguna cuestión concreta -y de esta manera pasa en algunas ocasiones-, sí vas a poder responder con total independencia. El órgano solicitado de elegir si la sentencia es en relación a derecho o, por el contrario, hay que estimar el recurso anunciado, es el Tribunal Superior de Justicia de la comunidad autónoma en concreto. Y sus sentencias tienen la posibilidad de demorarse bastante -la mayor parte de las ocasiones tienen la posibilidad de demorar un año-. Una vez interpuesta esta reclamación, el INSS dispone de 45 días (también hábiles) para ofrecer una contestación al trabajador. Y es entonces en el momento en que ya es conveniente acudir al poder de la ley para procurar por todos los medios que se reconozca nuestra prestación.
Lo siguiente es exponer de manera clara, descriptiva, precisa los hechos en que se fundamente la demanda. Lo que se haría es una reclamación anterior, donde manifestamos el desacuerdo por la resolución tomada. También se exponen las causas que apoyan la queja y se señala lo que verdaderamente se pide.